SOPA DE MISO
Esta es una de mis sopas favoritas, sencilla y medicinal, es un regalo para el cuerpo, sienta muy bien en cualquier momento. Para desayunar, para cenar o comer, cuando sé esta convaleciente, después de comilonas, si se tienes frío, etc.
El miso lo encontraremos en forma de pasta, obtenida por la fermentación de la soja, y puede estar combinada con arroz o cebada. Es rico en encimas y en lactobacillus, por ello es un excelente remedio para recomponer la flora intestinal. Es alcalinizante y depurativo de la sangre. Se debe consumir sin pasterizar ni hervir, para conservar sus propiedades. Se debe usar en pequeñas proporciones una cucharada por persona y día. Se suele usar en sopas y caldos, aunque también se usa en patés y otras salsas.
INGREDIENTES:
1 Cebolla pequeña
1 Zanahoria
20cm de alga wakame
1 Cucharada de miso por comensal
1 Cucharada sopera de aceite de buena calidad
PREPARACIÓN:
Pondremos a cocer verduras cortadas pequeñas cubiertas de agua, procuraremos que haya cebolla, una raíz tipo zanahoria y alguna hoja verde. La coliflor, brócoli, calabaza, puerro, calabacín... todas sirven según tengamos en casa y estación, con un trocito de alga wakame puesta en remojo 10 minutos, troceada. Con 2 verduras y el alga ya sale genial.
Yo añado un chorrito de aceite de oliva en crudo cuando las verduras ya están casi hechas (unos 20 min). También se puede pochar la cebolla con un poco de aceite al principio. Apartar un poco de caldo de la cocción en una taza y añadiremos una cucharadita de miso por persona. Yo suelo usar el Mugi miso, es de mis preferidos.
Añadiendo un poco de cereal cocido o un puñadito de legumbres cocidas, o tofu troceado (hervirlo 5 min con las verduras), o zumo de jengibre, o perejil picado, hacen de esta sopa un plato completo y nutritivo. “La sopa y el cereal son la pareja ideal”
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